07 marzo 2013

Quiero contarte algo


Quiero contarte algo,

Hace mucho, posiblemente antes de que tuviera consciencia de ello, ya tenía una relación contigo.

Como un hilo de seda, suave, delicado y puro que se ha ido transformando con el paso de los años,  latiendo más fuerte, vibrando en mí tu zumbido, imaginándote con una pureza innata, recreándome en tu belleza y sintiéndote con el mismo misterio.

Con el único sonido del llanto de tu tierra, ves, sin poder taparte los ojos, la crueldad, barbarie, hambre, ambición, corrupción y egoísmo que conviven a lo ancho y a lo largo de ti, eres compleja y diversa, rica y pobre, alegre y triste, eres contradictoria, inmensa y cautiva tanto como el hilo que nos une.

Eres África.

No dejes de aparecer en mis sueños, con el velo blanco en el que te envuelves, cógeme de la mano y   enséñame aquellos lugares que sólo conozco dormida. Allí, me sentaré en tu regazo exótico y me susurrarás con esa voz oscura y anciana porque el sol ilumina, especial e imperante, más aquí que en cualquier otro lugar.