Como el azul del cielo
de color infinito.
El universo como testigo,
es sereno y discreto
y si te acercas
se envuelve en timidez o se embravece.
¿Quién es?
Deja que la lluvia riegue mi alma.
Así crece, y puede ver
que la ternura reposa
en tu pecho,
en tus manos,
en tu cabeza,
¡una lindeza!
Ya en mi mente,
ya en mí.
Marta M